¿Alguna vez te has preguntado por qué ciertos lugares te resultan más atractivos que otros o por qué te generan emociones diferentes? Pues todo esto tiene una explicación científica en la que se basa una nueva tendencia de interiorismo para crear lugares que promuevan el bienestar. Se trata del ‘neurointeriorismo’, una corriente revolucionaria que combina la disciplina de la neurociencia con el diseño de interiores.
Este enfoque surge de la comprensión de cómo el entorno y los estímulos externos influyen en los sentimientos, el comportamiento y la cognición de las personas. En este artículo, te contamos en detalle qué es esta tendencia y por qué ha ganado popularidad.
Un diseño respaldado por la ciencia
El neurointeriorismo como concepto consiste en la aplicación de los principios de la neurociencia a la hora de diseñar un interior para crear espacios que optimicen el bienestar y el rendimiento de las personas. Aquí entran en juego elementos como la luz, el color, las texturas, las formas o la distribución del mobiliario que consiguen una respuesta concreta del cerebro humano.
A diferencia del diseño tradicional, que se enfoca en la estética y la funcionalidad, el neurointeriorismo considera cómo el cerebro percibe y responde a los estímulos del entorno. Esto incluye el estudio de cómo ciertos colores pueden afectar al estado de ánimo o cómo la elección de materiales puede impactar en la percepción de confort y seguridad.
Los fundamentos del neurointeriorismo
El neurointeriorismo se basa en diferentes investigaciones neurocientíficas que han demostrado la relación entre cómo los condicionantes externos afectan a la salud de las personas. Un ejemplo de esto es un estudio reciente en el que analizaron cómo la luz en una residencia de ancianos influía en su bienestar y en los ciclos de sueño.
De hecho, en 2002 nació en Estados Unidos la Academia de Neurociencia para Arquitectura (ANFA) para promocionar y avanzar el conocimiento que relaciona esta disciplina científica con una comprensión cada vez mayor de las respuestas humanas al entorno.
Gracias a todos estos progresos, puedes saber a qué estímulos ambientales responde el cerebro de manera predecible para crear interiores que generen experiencias concretas.
La importancia de la luz natural
La luz es un factor crucial dentro de esta corriente de interiorismo. En particular, la natural tiene beneficios positivos para la salud, como ayudar a regular los ritmos circadianos o a mejorar los estados de ánimo e incluso la productividad. Por otro lado, la artificial mal diseñada puede causar fatiga para la vista, dolores de cabeza y alteraciones en los patrones de sueño.
La psicología del color
Uno de los elementos más estudiados en el neurointeriorismo es el color. La investigación ha demostrado que los colores pueden tener un efecto profundo en nuestras emociones y comportamientos. Puedes usar paletas cromáticas específicas para conseguir efectos concretos en función de las necesidades de tus clientes. Por ejemplo, los tonos azules y los verdes ayudan a calmar, mientras que los rojos pueden aumentar la energía y la sensación de urgencia.
Comodidad en cuerpo y mente
La ergonomía en el neurointeriorismo no se limita a la comodidad física, sino que también tiene en cuenta la mental. Por eso, adapta los espacios para reducir la fatiga y mejorar la eficiencia.
La personalidad en el centro
En la decoración de interiores es fundamental que reflejes la personalidad de tus clientes para que sientan que estos lugares son suyos, que estén cómodos y seguros en ellos.
Este reflejo de la identidad de cada individuo es otra de las bases del neurointeriorismo. Si utilizas elementos decorativos y muebles hechos a medida para cada persona construirás un ambiente único.
La organización lo es todo
La forma en la que distribuyes los elementos en un espacio también juega un papel importante en cómo te sientes en un entorno. Los lugares bien organizados pueden reducir los niveles de estrés y aumentar la sensación de control y seguridad.
Por ejemplo, en entornos laborales, las oficinas con espacios abiertos y bien iluminados mejoran la creatividad, mientras que los cerrados generan sensaciones de claustrofobia y ansiedad.
La naturaleza importa
Como ya te hemos contado en otros artículos, incorporar elementos que recuerdan a la naturaleza en interiores tiene un impacto positivo en el bienestar de las personas. Esta conexión embellece los espacios y mejora el estado de ánimo de quienes los habitan.
El futuro del neurointeriorismo
A medida que la investigación en neurociencia avanza, es probable que el neurointeriorismo siga evolucionando y expandiéndose. De hecho, ya existe un laboratorio de I+D, el Well Living Lab, que se centra en estudiar los efectos de los interiores utilizando tecnologías punteras como sensores para el control del bienestar.
Si quieres empezar a aplicar esta disciplina a tus proyectos, recuerda que puedes hacer uso de nuestros servicios de fabricación de muebles personalizados. Así, crearás interiores exclusivos que representen la personalidad de tus clientes para que los sientan como propios.
Contacta con nosotros y cuéntanos qué diseños tienes en mente.